"Por supuesto, Turquía, el pueblo turco, estamos dispuestos a brindar apoyo a Azerbaiyán en cualquier área donde se necesite nuestra ayuda", dijo Cavusoglu citado por el servicio de prensa del presidente azerbaiyano, Ilham Alíyev.
Además, en una rueda de prensa conjunta con su par azerbaiyano, Ceyhun Bayramov, el canciller turco declaró que el régimen de alto el fuego en Karabaj no dio resultados y el Grupo de Minsk de la OSCE, que se dedica a la solución del conflicto, no tiene planes claros ni un mecanismo para resolver el problema.
A su vez, Alíyev declaró que la política de Turquía busca la paz y da resultados en Oriente Medio y el Cáucaso.
"La política de Turquía en la región, que busca exclusivamente la paz, ya surte resultados tanto en Oriente Medio como en el Cáucaso", dijo Aliyev citado por su servicio de prensa.
Según el presidente, la situación "provocada por una nueva agresión de Armenia", muestra una vez más que Turquía tiene autoridad tanto en la región como en el mundo.
"Por supuesto, esto nos fortalece e inspira. Hoy día nuestros pueblos y el mundo entero ven lo que significa la alianza de Turquía y Azerbaiyán", señaló Alíyev.
El 27 de septiembre volvieron a estallar choques armados en Nagorno Karabaj, foco de conflicto entre Armenia y Azerbaiyán desde que ese territorio, de población mayoritariamente armenia, decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
Ambos bandos, que se acusan de haber desatado esta espiral bélica sin precedentes desde la guerra de 1992-1994, ordenaron la movilización de reservistas, impusieron la ley marcial y sostienen combates con el uso de blindados, artillería, aviación y sistemas de misiles a lo largo de la línea que separa a sus tropas.
Para impulsar una solución negociada del conflicto se instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), copresidido por EEUU, Rusia y Francia.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj, que no es parte de las negociaciones.
El 5 de octubre, Rusia, Estados Unidos y Francia volvieron a condenar las hostilidades en Karabaj e instaron a cesarlas de inmediato y a reanudar negociaciones sin condiciones previas.