El documento menciona que el proyecto de ley sobre sanciones contra Nord Stream 2 que fue introducido en el Senado estadounidense a principios de junio prevé medidas limitativas "para todas las compañías" participantes del proyecto, así como "de una manera semejante a todos los servicios, tales como chequeos, inspecciones o certificaciones que son necesarios para la explotación de Nord Stream 2".
Por eso, escribe el diario, "en el Ministerio de Economía temen que el proyecto de ley estadounidense pueda introducir sanciones contra las acciones administrativas y técnicas de las instituciones federales por la construcción o explotación de la tubería".
La construcción del Nord Stream 2, impulsada por una alianza de empresas de Rusia, Alemania, Austria, Francia y los Países Bajos, fue suspendida en diciembre de 2019 después de que Washington amenazara con sanciones a la empresa suiza Allseas que realizaba las obras.
El gasoducto constará de dos ramales para transportar un total de 55.000 millones de metros cúbicos de gas anuales.
El proyecto fue concebido para diversificar las rutas de suministro de gas ruso a Europa y elevar la seguridad energética.
Se oponen al nuevo gasoducto EEUU, que busca vender a Europa el gas natural licuado de sus yacimientos de esquisto, y algunos países europeos como Polonia, Letonia y Lituania.