"Es una farsa, pues una reforma del Estado implica cambios en la legislatura, transformar las leyes, lo cual corresponde a la Asamblea Legislativa", dijo a Sputnik Villalona, de la organización Profesionales por la Transformación de El Salvador (Proes).
Bukele afirmó el 27 de mayo, durante un encuentro en Casa Presidencial con líderes sindicales, que reformaría el aparato estatal, para lo cual contaba supuestamente con el 97% del apoyo de la población.
"Él puede, cuando más, vetar una propuesta de la Asamblea, así como sus iniciativas están en manos de los diputados: decir que va a reformar el Estado son declaraciones mediáticas, para confundir a la gente de asuntos de fondos", agregó Villalona, quien integró el Consejo Nacional del Salario Mínimo.
Respecto a la reunión con supuestos representantes de la clase trabajadora, Villalona definió al grupo recibido por Bukele como una "mafia" que no defiende los derechos laborales, los cuales han sido vulnerados sistemáticamente durante la actual administración.
"Hay suficientes pruebas para demostrar que Bukele es un presidente contrario al sector laboral", acotó Villalona, a propósito del encuentro.
Bukele se reunió hace dos semanas con representantes de los principales representantes del empresariado nacional, con la excepción de las familias Cristiani y Simán, para colegiar una hoja de ruta a la reapertura económica tras la cuarentena por el COVID-19.