Según la decisión de la Corte, no ha de ser castigado el que realice la eutanasia de "una persona mantenida viva con tratamientos de soporte vital y que padece una patología irreversible, fuente de sufrimientos físicos o psicológicos intolerables, pero que sigue siendo plenamente capaz de tomar decisiones libres y conscientes".
La comprobación de las condiciones necesarias para proceder a la eutanasia será competencia de una estructura pública del Servicio Nacional de Salud.
Con esta decisión la Corte Constitucional respondió a la solicitud planteada por el Tribunal de Apelación de Milán en el marco del procedimiento contra Marco Cappato que acompañara a Suiza al Dj Fabo, ciego y tetrapléjico, para realizarle la eutanasia y después se entregara a las autoridades italianas.
En 2018 la Corte concedió al Parlamento un año para elaborar una ley sobre la eutanasia, pero los diputados no lograron hacerlo.
En Europa, la eutanasia está legalizada en Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos, pero está prevista tan solo para los ciudadanos de estos países.
El único país que permite la eutanasia para los ciudadanos extranjeros es Suiza.
Por lo tanto, cada año crece el número de enfermos incurables italianos que van a morir a clínicas suizas.