Al líder independentista, que se encuentra refugiado de la justicia en Bélgica desde hace meses, se le rechazó la autorización para viajar a Canadá bajo la invitación de asociaciones partidarias de la independencia de Quebec, según publicaron varios medios locales.
El abogado de Puigdemont con sede en Montreal, Stéphanie Handfield, aseguró a los medios canadienses en una rueda de prensa que el motivo para prohibir la entrada a Puigdemont son los delitos de sedición y malversación de los que le acusa el Tribunal Supremo de España.
El juez español Pablo Llarena emitió el pasado 14 de octubre una orden de arresto internacional contra el expresidente catalán, tras la publicación de una sentencia que condenó a penas de entre nueve y 13 años de cárcel a varios de sus excompañeros de gobierno.
En concreto, las autoridades deniegan a Puigdemont una autorización electrónica que le permitiría entrar y salir de Canadá de forma ilimitada a lo largo de seis meses.
El abogado canadiense de Puigdemont aseguró que esta decisión "no respeta la presunción de inocencia" de Puigdemont y anunció que recurrirá a la justicia canadiense.
Por su parte, el primer ministro de Quebec, François Legault, declaró en una rueda de prensa sentirse "perplejo" por la decisión de las autoridades canadienses: "Me gustaría que el Gobierno canadiense explique por qué se niega a otorgarle esta visa".