"Los talibanes deben demostrar que se toman en serio la paz. En los últimos días, hemos visto el estremecedor secuestro y asesinato del defensor de los derechos humanos Abdul Samad Amiri y los ataques indiscriminados en Kabul que causaron muchas bajas civiles. Ahora es el momento de reducir la violencia", publicó la legación diplomática en su cuenta de Twitter.
Afganistán vive una situación de inestabilidad debido a los ataques que lanzan los talibanes y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países), pese a la fuerte presencia militar de EEUU y sus aliados.
Hasta ahora, los talibanes han condicionado el proceso de paz en Afganistán a la retirada de las tropas extranjeras e insisten en acordar el calendario de su repliegue con EEUU, no con el Gobierno afgano.
Representantes de EEUU y del Movimiento Talibán habían mantenido varias rondas de negociaciones en Doha, pero el presidente Donald Trump las dio por suspendidas mediante un tuit que publicó en la madrugad del 8 de septiembre, luego de que un atentado en Kabul provocara 12 muertos, entre ellos un militar estadounidense.