El vicecanciller ruso Miajíl Bogdánov adelantó el 15 de julio que en las reuniones con miembros de Hamás este día 16 en Moscú se debatirían la situación en la región y las vías de restaurar la unidad palestina.
La Casa Blanca desveló el 22 de junio su plan, llamado 'acuerdo del siglo' por los medios árabes, que busca zanjar el prolongado conflicto palestino-israelí.
Más de la mitad de los fondos se destinarían a Cisjordania y Gaza para transformar radicalmente su economía, duplicar el Producto Interno Bruto (PIB) y reducir la pobreza a la mitad en diez años.
Los palestinos boicotearon la conferencia y el plan económico por completo, comparándolo con un intento de comprarlos para que firmen un acuerdo de paz favorable a Israel.
Las relaciones entre Hamás y Damasco
Además, Hamás todavía no ha restablecido relaciones con Damasco ni tampoco tiene representación en Siria.
La semana pasada, Mahmud Zahar, uno de los líderes del movimiento, afirmó que Hamás trabaja para normalizar las relaciones con las autoridades de Siria, que empeoraron durante los años de la guerra civil en el país árabe.
"El movimiento no tiene ninguna representación en Siria, ni tampoco ninguna relación con" Damasco, dijo Abu Marzuk, encargado de relaciones externas de Hamás.
El movimiento tenía su sede extranjera en Damasco, pero se vio obligado a abandonarla a causa del conflicto que se produjo entre el Gobierno y la oposición sirias.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas.
Cientos de miles de personas perdieron la vida en las hostilidades en el país árabe.
La solución del conflicto se busca en dos plataformas, la de Ginebra, bajo los auspicios de la ONU, y la de Astaná (en la capital kazaja, que a finales de marzo pasó a llamarse Nursultán), copatrocinada por Rusia, Turquía e Irán.