"Condenamos con firmeza el nuevo ataque aéreo lanzado el pasado día 23 de junio contra el aeropuerto de Abha. Este crimen contra la población civil, reivindicado al igual que el anterior por la milicia huzí de Yemen, es completamente inaceptable y agrava la escalada de tensión en la región", aseguró el Ejecutivo español.
Además, España manifestó su solidaridad con las autoridades "y el pueblo amigo de Arabia Saudí".
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Sin embargo, también reiteró la necesidad de "resolver el conflicto en Yemen por medios pacíficos" y apoya los esfuerzos del enviado especial de Naciones Unidas, Martin Griffiths, para materializar el acuerdo de Estocolmo de diciembre de 2018.