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Dormir más el fin de semana para compensar la falta de sueño durante la semana laboral no solo no sirve para eso, sino que tiene efectos negativos para la salud porque aumenta las probabilidades de contraer enfermedades como la obesidad o la diabetes, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Boulder de Colorado (EEUU).
La investigación, publicada en la revista Current Biology, ofrece evidencias científicas de que alternar periodos de privación de sueño de lunes a viernes y periodos de sueño largos durante los fines de semana provoca trastornos metabólicos.
Según Christopher Wright, uno de los autores del estudio, el riesgo de contraer enfermedades metabólicas —como la obesidad y la diabetes— aumenta en tanto que se reducen las horas de sueño. Ante una de las medidas que se toman para recuperar esas horas, Wright advierte de que no sirve para nada.
Para llegar a esa conclusión se presentaron al estudio 36 voluntarios adultos sanos —hombres y mujeres— en edades comprendidas entre los 18 y los 39 años. Durante las dos semanas que hicieron vida en el laboratorio, los investigadores analizaron lo que comían, el tiempo que se exponían a la luz y las horas que dormían diviéndolos en tres grupos: uno que dormía nueve horas todos los días, otro que dormía cinco horas por la noche y otro que dormía cinco horas cinco noches y todas las que quería los fines de semana.
Los investigadores llegaron a la conclusión de que los dos primeros grupos —los que no podían dormir nunca el tiempo que querían— engordaron y picoteaban tras la cena.
El tercer grupo —al que habían permitido dormir cuanto habían querido los fines de semana— arrojó resultados más interesantes. Los hombres recuperaban más el sueño perdido que las mujeres y consumían menos calorías los fines de semana. Cuando comenzaban de nuevo los cinco días de privación de sueño, su reloj biológico se retrasaba y volvían a comer después de cenar, de manera que engordaban. Además, su organismo regulaba peor los niveles de azúcar en sangre. "Los cambios en el reloj biológico probablemente contribuyen a desajustar los niveles de azúcar en sangre y aumentan el riesgo de tener diabetes", explica Wright.
El estudio demuestra que someter al cuerpo a un ritmo poco saludable durante los días laborales y luego compensar tantas jornadas de trabajo en solo dos días tiene consecuencias negativas para el organismo. Los expertos recomiendan dormir bien durante toda la semana y mantener un ritmo de sueño estable.
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