"La vida de los detenidos por Ucrania está en peligro; la delegación rusa en el Grupo de Contacto hará todo lo posible para garantizar el regreso de las personas ilegalmente retenidas por Ucrania", dijo el representante a los periodistas.
El Ministerio de Exteriores ruso denunció en diciembre que el asesinato de Ivanov, perpetrado en aquel mismo mes, fue premeditado.
"La muerte de Ivanov no fue accidental, el análisis mostró que fue por torturas", comentó Grizlov.
El diplomático señaló que el ruso figuraba en las listas de intercambio de rehenes de diciembre de 2017, pero Kiev "de manera mentirosa evitó liberarlo".
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Un representante de las milicias de Lugansk afirmó que Ivanov luchaba a su lado como voluntario.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más 10.300 muertos.
