"Hasta ahora, las noticias relacionadas a la sexta ronda apuntan a que concluirá con algunos acuerdos y avances en temas clave como las reglas de origen, programando formalmente una séptima ronda para el mes de febrero", dice el documento enviado por la institución a sus clientes en los mercados bursátiles y de divisas.
"La expectativa de que las negociaciones continuarán, favorece la cotización del peso de forma temporal", pronostica el análisis del banco privado.
La sexta ronda es la última del calendario original de las tratativas que comenzaron en Washington, en agosto pasado, por iniciativa del presidente estadounidense Donald Trump.
Ese apreciación de la moneda mexicana, "principalmente es resultado de un menor nerviosismo relacionado a la posibilidad de que Estados Unidos abandone el TLCAN en el corto plazo", indica la previsión.
Sin embargo, a mediano plazo "los participantes del mercado temen que un regreso de la incertidumbre por el TLCAN o las próximas elecciones en México, puedan generar presiones al alza para el tipo de cambio hacia niveles por arriba de 19 pesos por dólar".
Trump y los negociadores polemizan en Davos
El análisis señala que el esperado discurso que Trump ofreció este viernes en el Foro Económico Mundial, en Davos, Suiza, destacó que la prosperidad de su país es clave para el crecimiento económico global, y que "está preparado para negociar acuerdos (comerciales) bilaterales", anota el balance semanal de los mercados.
Trump dijo que "EEUU ya no hará más la vista gorda a las prácticas comerciales desleales, no podemos tener un comercio libre y abierto si algunos países explotan el sistema a expensas de otros".
Por su parte, Guajardo planteó en el mismo foro suizo que las negociaciones deberían concluir antes de las elecciones presidenciales y legislativas en su país de julio próximo.
"La gran oportunidad es (concluir) entre marzo y el fin del mes de junio, porque tenemos varias limitaciones", aseguró.
Si fuera cierta la idea del titular de la Casa Blanca "¿por qué el déficit comercial de EEUU con China es de 350.000 millones de dólares, sin un tratado comercial?", se preguntó Guajardo.
La respuesta es que los tratados comerciales "no resuelven los temas de desarrollo y equidad en un país, son las políticas domésticas las que tienen que hacerse cargo de estos retos y jugar en un terreno justo", replicó.
Los tres temas cruciales que Lighthizer propuso sobre la mesa son, la cláusula "sunset" (ocaso), para renegociar cada cinco años el acuerdo; y, la anulación el mecanismo de protección de inversiones y la revisión de las llamadas "reglas de origen" del sector automotriz, que acapara más de la cuarta parte de las exportaciones mexicanas hacia EEUU.
Trump quiere endurecerlas para aumentar los componentes norteamericanos de los vehículos del 62,5% actual a 85%, con 50% de autopartes estadounidenses.
Este fin de semana, antes de la reunión de los tres jefes negociadores, México y Canadá presentarán por primera vez sus contrapropuestas a EEUU en esos tres asuntos espinosos, en busca de modernizar el pacto que cumplió 24 años de vigencia en enero de este año.