"El presidente de Navantia mantendrá varios encuentros a lo largo de estos dos días con altos representantes de la Marina y el Ministerio de Defensa saudí, quienes han confirmado el máximo interés por cerrar el contrato de las corbetas", comunicó la empresa.
Estos buques de guerra, con capacidad para transportar helicópteros de combate, se encuentran equipados con cañones de diverso calibre para el lanzamiento de misiles y torpedos.
Según explicó Navantia a través de un comunicado, la opción de lograr este contrato resulta "estratégica" por las excelentes oportunidades que presenta al propiciar un "buen posicionamiento" para la empresa en Oriente Medio, donde abundan los "clientes potenciales".
Organizaciones no gubernamentales como Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón (que integran la campaña Armas Bajo Control) denunciaron en repetidas ocasiones que la venta de este material de guerra a Arabia Saudí es ilegal.
A su modo de ver, la posibilidad de que este material bélico pueda ser utilizado por parte de Arabia Saudí en el conflicto activo en Yemen viola la legislación española e internacional sobre el comercio de armas.