"Todo el mundo está interesado en que Turquía no siga evolucionando en dirección oriental", dijo a los periodistas en los márgenes de la reunión conjunta de los ministros de Exteriores y de Defensa de los países miembros de la Unión Europea que se celebra en Bruselas.
Gabriel exhortó a lograr con esfuerzos mancomunados la desescalada en las relaciones mutuas, recordando que incluso en tiempos de la dictadura militar en Turquía nadie quería socavar su estatus de miembro de la OTAN ni permitir su evolución en una "dirección incorrecta".
Las relaciones entre Berlín y Ankara se agravaron tras el arresto del periodista alemán de origen turco Deniz Yücel en Estambul, acusado de "propaganda terrorista" tras publicar e-mails de un ministro turco y yerno del presidente Recep Tayyip Erdogan.
El domingo pasado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, comparó la política actual de Berlín con "las acciones de los nazis", lo que provocó fuertes críticas por parte de Alemania.
Previamente las autoridades de la ciudad alemana de Gaggenau, en el estado federal de Baden-Württemberg, cancelaron el encuentro con la comunidad turca local del ministro de Justicia turco, Bekir Bozdag, quien llegó a Alemania en vísperas del referendo sobre las enmiendas a introducir en la Constitución de Turquía.
Como consecuencia Bozdag se negó a reunirse con su homólogo alemán, Heiko Maas, y abandonó Alemania.
En Alemania viven cerca de un millón 410 mil ciudadanos de Turquía, que tienen el derecho a votar en dicho referendo que se celebrará en su país el 16 de abril.