"Como partido vencedor tenemos la intención de conformar Gobierno", afirmó el político, aunque admitió que deberá buscar una coalición con otras fuerzas políticas y destacó que hasta el momento no existe ninguna decisión al respecto.
Esta situación podría ser aprovechada por la coalición de izquierda, conformada por el Partido Pirata y los Verdes.
Según datos previos, tras procesar el total de los votos, el conservador Partido de la Independencia recaudó el 29% de los apoyos, pero deberá aliarse a otras fuerzas para controlar al menos la mitad del Parlamento.
Según los expertos locales, es poco probable que se trate de la coalición conformada anteriormente, cuando el Partido de la Independencia se alió al Partido Progresista.
Lo más probable es que la nueva coalición surja sobre la base de los Verdes, que tienen puntos en común tanto con el Partido de la Independencia como el el Partido Pirata.
Esto significaría que el Partido de la Independencia podría mantener el poder aliándose a los Verdes, o enfrentarse desde la oposición a la coalición de izquierda si los Verdes y los Piratas se alían.
Las elecciones debían llevarse a cabo en mayo de 2017, pero fueron adelantadas debido a la crisis política que estalló después de la publicación de los 'papeles de Panamá' en abril.
En ese entonces se descubrió que la mujer del primer ministro Sigmundur Gunnlaugsson, era propietaria de una empresa radicada en un paraíso fiscal.
Gunnlaugsson había llegado al poder precisamente con la promesa de luchar contra los paraísos fiscales y la crisis financiera que agobiaba al país.
El primer ministro dimitió el 7 de abril presionado por las protestas multitudinarias que encabezó la oposición.
