En ejercicios anteriores, los turistas rusos eran los principales visitantes de la Costa Dorada y la Costa Brava: en 2009 veranearon 216.000 rusos y en 2013 la cifra estaba cerca del millón de visitantes.
Sin embargo, la caída del rublo, la crisis de Ucrania o la potenciación de destinos nacionales hizo que comenzase la caída entre un 15% y un 20% en 2014, un porcentaje que aumentará este año según las previsiones de los hoteleros.
Creen que, en el mejor de los escenarios, caerá un 60%, pero éste puede alcanzar el 90% de caída, según los datos de reservas actuales que recoge el periódico La Vanguardia.
Los hoteleros catalanes apuestan cada vez más por otro tipo de turismo.
Tras la caída de los visitantes rusos, los más asiduos de las costas de Cataluña son los ingleses, franceses o belgas, aunque en estancia y gasto medio, los rusos continúan estando en el primer puesto.