El 31 de mayo, un corresponsal de RIA Novosti, Mijaíl Turguíev, fue atacado con gas pimienta en la cara por parte de un oficial de policía de Minneapolis a pesar de identificarse como reportero, mientras cubría protestas contra la brutalidad policial y el racismo en Estados Unidos.
Las protestas fueron provocadas por la muerte del afroamericano George Floyd, mientras estaba bajo custodia policial.
"Todos estos casos deben ser investigados", dijo Dujarric.
El portavoz sostuvo que el secretario general de la ONU, António Guterres, cree que las sociedades son violentadas cuando los periodistas están bajo ataque y afirmó que no puede haber democracia sin libertad de prensa.
El asalto a Turguíev no fue el único caso de violencia policial contra periodistas durante las protestas, que han estado en curso desde el 25 de mayo.
Un equipo de CNN fue detenido la semana pasada durante la cobertura en vivo de las protestas.
El gobernador de Minnesota, Tim Walz, luego se disculpó con los periodistas por el arresto.