"Pensamos inutilizar al robot canguro, ahora está en EEUU donde fue exhibido en la Toy Fair 2020, en Nueva York. Nunca hemos dicho que sea Arnold Schwarzenegger, ni mencionado su nombre, ni pretendido aprovechar su físico para la promoción de nuestro producto. Vamos a inutilizarlo", aseguró a Sputnik un portavoz de Promobot.
El sitio web TMZ informó la víspera que Schwarzenegger exige el pago de 10 millones de dólares si la empresa se empeña en usar su imagen para la publicidad de los Robo-C, la gama de androides que pueden personalizarse a pedido de cada cliente.
Después de enseñar su producto en la feria CES, en Las Vegas, Promobot supuestamente aseguró al equipo del exgobernador de California que dejaría de usar el Arnold-bot, pero a finales de febrero volvió a exhibirlo, esta vez en Nueva York, por lo que se interpuso un pleito judicial.
Según la compañía rusa, fundada en 2015 en la ciudad de Perm, en los Urales, están intentando "aclarar la situación para evitar un malentendido y un conflicto".
"Promobot no ha recibido ninguna demanda, judicial o de otros organismos, de parte de Arnold Schwarzenegger. Llevamos varios meses manteniendo conversaciones sobre el uso de imagen. La información sobre un pleito, publicada en el portal TMZ, es falsa", dijo un representante de la empresa.
El precio mínimo de un androide, capaz de reproducir más de 600 microexpresiones faciales, es de unos 18.600 dólares.
La empresa está presente en 35 países, entre ellos España, Brasil, Chile y México.