Subrayó que Rusia "tomó nota de las informaciones sobre el creciente número de bajas entre la población civil de Afganistán como resultado de las acciones de las tropas extranjeras".
"Lo que está pasando provoca una profunda preocupación", dice el comunicado.
Otro de los recientes ataques aéreos de las tropas extranjeras fue realizado en la provincia de Paktiya y mató a ocho civiles e hirió a cuatro.
"Nos vemos obligados a constatar de nuevo que los 'fallos' tanto de las fuerzas gubernamentales como de los militares extranjeros que causan tragedias humanas ocurren cada vez más a menudo", declaró la Cancillería rusa al agregar que esta falta de profesionalismo provoca "dudas serias" en las actividades de las tropas de la OTAN en Afganistán.
El comunicado atribuye también el aumento de víctimas a "la decisión estadounidense anunciada previamente de intensificar sus actividades militares en Afganistán".
En opinión del Ministerio de Exteriores ruso, esta afirmación se confirma por las estadísticas del mando militar de EEUU que muestran que en los primeros diez meses de 2018 Washington lanzó un número récord de bombas en Afganistán.
En este contexto, Rusia exigió llevar a cabo una investigación minuciosa para castigar a los culpables y poner fin a la guerra en este país.
"Volvemos a llamar a todas las partes involucradas a poner fin a la guerra fratricida e iniciar el proceso de la reconciliación nacional", dice el texto.
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Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques que lanza el movimiento Talibán y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS (Estado Islámico, prohibido en Rusia) pese a la fuerte presencia militar de EEUU y otros países de su órbita.