En total arribaron a Siria familiares de cinco militares rusos, entre ellos los padres de Román Filípov, la esposa y los tres hijos de Marat Ahmetshin, la esposa y el hijo de Oleg Peshkov, la esposa y la hija de Valeri Matvéev, y la hija de la enfermera militar Nadezhda Durachenko.
Además, la delegación visitará la tumba del Soldado Desconocido, se reunirá con familiares de militares sirios caídos y visitará una escuela internado de huérfanos, a la que llevará ayuda humanitaria.
El grupo también visitará la base aérea de Hmeymim, donde colocará una ofrenda floral al monumento a los soldados rusos caídos en este país árabe.
Desde que el 30 de septiembre de 2015, a solicitud del presidente de Siria, Bashar Asad, Rusia comenzó a atacar objetivos terroristas en este territorio y varios militares rusos perdieron sus vidas en cumplimiento de misiones de combate.
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El 6 de diciembre de 2017 el Estado Mayor ruso anunció la derrota de ISIS en Siria, sin embargo, en el país árabe todavía están presentes sus combatientes debilitados y otras células terroristas.
