El mandatario Vladímir Putin dijo en una rueda de prensa que las presiones occidentales que sufre Rusia al final contribuyen a su desarrollo.
"Las sanciones nos obligaron a empezar a trabajar en una serie de direcciones. Hasta expertos occidentales reconocen nuestros avances. Por ejemplo, en 2017 conseguimos la autosuficiencia casi al 100% en el sector de la industria de material de transporte. Lo mismo en el sector automotriz y otras áreas claves. Se hizo un auténtico salto en el tema agropecuario, aumentándose dieciséis veces las ventas al exterior, algo increíble. Así que sí hay desventajas, pero también hay ventajas", señaló.
Para el analista español Javier Colomo Ugarte, doctor en Geografía e Historia, las sanciones impuestas a Moscú por Bruselas y Washington es una respuesta al resurgimiento de Rusia, algo que no "terminan de aceptar".
"Indudablemente, en unos años o en una década Rusia se convertirá en una nación muy potente", auguró Javier Colomo Ugarte, al argumentar que se trata de un país con "capacidades tecnológicas enormes" y con un pueblo "muy apegado a su soberanía", una cualidad forjada a lo largo de los siglos de la historia de esa nación.