La investigación también señala que el Sol atraviesa un ciclo de 11 años, y durante este tiempo su actividad es cíclica, cambiando entre moderada y tumultuosa. Cuando la actividad es baja, se conoce como mínimo solar, y cuando la actividad es alta, se conoce como máximo solar. En momento de actividad intensa, pueden interactuar con satélites e incluso influir en las redes eléctricas de la Tierra. Uno de los resultados más importantes de la investigación es conocer con más precisión la intensidad de estos fenómenos.
"Una de las cosas que estamos descubriendo es que prácticamente todas las estrellas que tenemos cerca tienen sistemas planetarios, es decir que no hay nada típico acerca de nuestro sistema estelar. Cómo puede ser que seamos únicos. Ahora más allá de que no seamos únicos, las estrellas están tan lejos unas de otras, que va a llevar mucho tiempo comunicarse con habitantes de otros sistemas estelares.