El portavoz de la Cancillería iraní, Bahram Qasemi, subrayó en su canal de Telegram que "la política fundamental de Irán consiste en no interferir en los asuntos internos de otros países".
"Los acontecimientos ocurridos en los últimos días en Sudán son un problema interno del país; Irán siempre ha abogado por la estabilidad y la seguridad en los países musulmanes", apostilló.
El ministro sudanés de Defensa, Awad Mohamed Ahmed Ibn Auf, confirmó este 11 de abril la detención del presidente Omar al Bashir, la formación de un consejo militar —que gobernará el país durante dos años— y la declaración del estado de emergencia por tres meses.
Además declaró que la Constitución de 2005 pierde su vigencia.
En los últimos días de las protestas antigubernamentales murieron decenas de personas y más de 150 resultaron heridas.
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Las manifestaciones comenzaron en diciembre pasado, después de que el Gobierno decidiera aumentar los precios de los productos básicos.