"Como bien saben, EEUU durante la Guerra Fría llamaba a respetar la Carta Magna de la ONU y criticaba la injerencia de la Unión Soviética en los asuntos de otros países, pero, una vez terminada la Guerra Fría, vemos con desconsuelo que es precisamente Washington quien con más frecuencia injiere y utiliza la fuerza como argumento", dijo el general mayor en una rueda de prensa.
"Pekín siempre defendió los cinco principios de la coexistencia pacífica, entre ellos la no agresión y la no injerencia en los asuntos internos de otros países, lo que se corresponde con la Carta Magna de la ONU", indicó el oficial chino.
El experto explicó que cuando algunos países occidentales intentan exportar la democracia a otros Estados y continentes, por ejemplo, a África, se desvela que las buenas intenciones no resultan suficientes.
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"Si los habitantes locales no están dispuestos a hacer lo que hace falta, los resultados no siempre resultan favorables", advirtió.
Para Xu, aunque el modelo chino no les resulte a todos el ideal, en su país funciona de manera eficaz, pero eso no significa que Pekín quiera imponérselo a otros países.
