"La cancillería ecuatoriana informó el 28 de febrero a Honduras que el Gobierno de Ecuador se ratifica, defiende y promueve la candidatura de la ministra María Fernanda Espinosa, porque cuenta con el perfil y experiencia necesarios para conducir y fortalecer los trabajos de la Asamblea General de Naciones Unidas", señala un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Pero a decir de Ecuador, el apoyo que recibió Pazmiño por parte de Honduras fue "unilateral" y "más no una confirmación expresa de la propuesta de intercambio de septiembre 2014, aspecto sobre el cual la misión ecuatoriana ante la ONU, en Nueva York, insistió a su par hondureña, en enero 2015".
De acuerdo con información oficial, en posteriores reuniones de altas autoridades, e incluso en agosto de 2017, el vicecanciller ecuatoriano le informó a su par centroamericano que cancillería "registró de buena fe el apoyo de Honduras como unilateral, tal como se refleja en la nota diplomática hondureña para la candidatura de Patricio Pazmiño a la referida corte".
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Esto debido al reclamo hondureño, que en una misiva del 22 de febrero pasado recordó que Ecuador ya ostentó la presidencia del organismo en 1973, mientras que su país no ha tenido esa oportunidad, por lo que "a la luz del refrescamiento de estos hechos, insto (…) a vuestra excelencia a reconsiderar su postulación, desistiendo de la misma", rezaba el texto.
El pasado 21 de febrero, Ecuador presentó la candidatura de Espinosa para presidir la Asamblea General en el 73 periodo de sesiones, que comenzará en septiembre de este año y cuya elección será el 5 de junio.
Según la carta fundacional de la ONU, la presidencia de la Asamblea General es el cargo de elección democrática y universal de los países miembros de mayor relevancia dentro del organismo.
