"La gira inicia hoy (el 24 de octubre) en República Dominicana, pero no está relacionada con el diálogo, la idea es denunciar el fraude electoral del pasado 15 de octubre", informó a Sputnik una fuente del parlamento.
Medina fue nombrado como uno de los testigos del proceso exploratorio de diálogo, que comenzó en Santo Domingo el 13 de septiembre entre el Gobierno y la oposición venezolana, y que quedó suspendido el 27 de octubre cuando los opositores decidieron no acudir a la segunda cita.
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La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) quiere manifestar en esta gira que necesita "condiciones electorales" para los futuros eventos de sufragio.
De acuerdo con el comunicado de prensa, la delegación parlamentaria, después de la visita a Santo Domingo, viajará a la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Ginebra para reunirse con su secretario político, Jeffrey Feltman, experto en materia electoral.
"Solicitaremos, en primer lugar, que en Venezuela se realice una auditoría creíble para todos con respecto a los resultados de las elecciones regionales del pasado 15 de octubre y que la ONU pueda ser observador internacional en futuros eventos electorales y que se puedan establecer garantías democráticas", indicó.
Florido detalló que están previstas reuniones con miembros del Grupo de Lima, de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de la Unión Europea, y que no descarta reunirse con representantes de gobiernos y organismos internacionales en materia de derechos humanos.
El Gobierno de Nicolás Maduro ha denunciado que la oposición busca consenso en el extranjero para iniciar un nuevo ciclo de protestas en el país, como las que se registraron entre abril y julio de este año y las cuales dejaron 126 muertos y miles de heridos.
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Maduro acusó a Florido y al presidente del parlamento, Julio Borges, de "traicionar" al país por pedir sanciones económicas contra Venezuela que, sostuvo, afectan la recuperación del país sudamericano que desde hace tres años sufre dificultades económicas como consecuencia de la caída del precio del crudo.
La oposición, por su parte, denuncia que en Venezuela no existe independencia de poderes y que se creó una Asamblea Nacional Constituyente netamente oficialista para imponer las decisiones del Gobierno, al que califica de "dictadura".