"Las autoridades de Birmania deben suspender las operaciones militares y garantizar el acceso sin barreras de la ayuda humanitaria a la población", dijo Guterres al intervenir en la Asamblea General de la ONU.
La violencia en el país asiático se desató el pasado 25 de agosto después de que el grupo insurgente 'Ejército para la Salvación Rohinyá de Arakán' (ARSA, considerado terrorista por el Gobierno birmano) atacara varios puestos policiales y cuarteles militares en este estado, los enfrentamientos dejaron más de 400 muertos.
Los rohinyás se establecieron en Arakán (antiguo nombre de Rakáin) a finales del siglo XIX y a principios del XX, durante la época colonial cuando los británicos alentaron su traslado desde Bengala Occidental a un territorio con escasa mano de obra agrícola.
Birmania, una nación mayoritariamente budista, deniega ciudadanía y derechos civiles a esta comunidad musulmana de unos 1,1 millones de personas, alegando que son inmigrantes bengalíes.
Los ensayos de Corea del Norte
El secretario general de la ONU, desde la tribuna de la Asamblea General de la ONU, condenó los ensayos nucleares y de misiles de Corea del Norte llamó a cumplir las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Al mismo tiempo, advirtió que la solución del problema norcoreano debe ser política.
"La solución debe ser política (…) No debemos ir a ciegas hacia una guerra".
El secretario general añadió que “todos los países deben demostrar su compromiso con el objetivo común del mundo sin armas nucleares”.
"Llamo al Consejo de Seguridad a continuar siendo unido: solo esta unidad puede llevar a la desnuclearización de la península coreana", dijo.
Corea del Norte realizó este año su sexta prueba nuclear, con una bomba de hidrógeno para ser colocada en misiles intercontinentales, y una quincena de pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo el lanzamiento de dos supuestos ICBM capaces de alcanzar el territorio de EEUU y dos misiles de alcance intermedio que sobrevolaron la isla japonesa de Hokkaido.
El 11 de septiembre, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad una resolución que endurece las sanciones contra Corea del Norte en respuesta a su sexto ensayo atómico.
La resolución congela la exportación del crudo a Corea del Norte al nivel de los 12 meses anteriores, limita la venta de derivados del petróleo a dos millones de barriles anuales, embarga la exportación de gas natural licuado y comprimido, veta la importación de textiles provenientes de Corea del Norte y prohíbe nuevas contrataciones de la mano de obra norcoreana.
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Las nuevas sanciones se suman a las anteriores, del 5 de agosto, que incluían la prohibición de importar hierro, carbón, plomo y mariscos de Corea del Norte, aumentar el número de trabajadores norcoreanos empleados en otros países, lanzar nuevos proyectos conjuntos y ampliar los existentes.
El tema de los refugiados
Antonio Guterres instó a la comunidad internacional a restablecer la integridad del sistema de protección de los refugiados.
"Necesitamos restablecer la integridad del régimen de protección de los refugiados y la simple decencia de la compasión humana", dijo Guterres.
"El problema consiste en el conflicto, persecución y pobreza absoluta", destacó Guterres al agregar que "nos enfrentamos no solo a la crisis de refugiados, sino a la de solidaridad".
Precisó, además, que "el número de refugiados al que hacemos frente puede ser controlado" si se distribuyen las responsabilidades.
Conflicto entre Palestina e Israel
El secretario general de la ONU confirmó su apoyo a la solución del conflicto entre Israel y Palestina basado en la creación de dos Estados independientes.
"La solución basada en el principio de dos Estados sigue siendo la única salida, resulta imprescindible lograrla", dijo el jefe de Naciones Unidas.
"Debemos devolver a la gente la esperanza", instó el funcionario, quien recordó además que el mes pasado visitó Israel y Palestina.
Los diálogos de paz entre Palestina e Israel se encuentran en un punto muerto desde 2014.
Los palestinos reivindican la creación de un Estado dentro de las fronteras de 1967 con capital en Jerusalén oriental.
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Israel, por su parte, se niega a volver a las fronteras de 1967 y mucho menos compartir con los árabes la ciudad de Jerusalén, la que proclama como su "capital eterna e indivisible".
Asimismo, en 2018 se planea celebrar una reunión de jefes de oficinas para la lucha contra el terrorismo, apuntó el secretario general de la ONU.
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"El año que viene estoy dispuesto a celebrar una reunión entre los jefes de las oficinas de la lucha contra el terrorismo de los países miembros de la ONU para sentar las bases para la cooperación antiterrorista internacional", dijo en el marco de la 72 sesión de la Asamblea General de la ONU.
Guterres llamó a intensificar los esfuerzos internacionales en la lucha contra el terrorismo.
"No es suficiente combatir a los terroristas en los campos de batalla o cortar sus fuentes de financiación", dijo.
La Oficina de las Naciones Unidas de Lucha contra el Terrorismo se estableció mediante la adopción de una resolución de la Asamblea General el 15 de junio de 2017.
El 21 de junio de 2017, Vladímir Voronkov, de Rusia, fue nombrado secretario general adjunto de la Oficina.
