"Construir un muro es una decisión soberana de Estados Unidos, pero buscar que México lo pague es inaceptable", puntualizó el jefe de la diplomacia mexicana, en declaraciones en la embajada mexicana en Washington, difundidas por la prensa en el país latinoamericano.
"Un impuesto a las importaciones de Estados Unidos a productos mexicanos no es manera de hacer que México pague por el muro, sino al consumidor norteamericano, que pagaría más caros los aguacates, las lavadoras, las televisiones" exportadas desde el otro lado de la frontera, dijo Videgaray, quien fue secretario de Finanzas casi cuatro años.
Videgaray ofreció con el secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, un balance preliminar de sus reuniones con funcionarios de alto nivel de la Casa Blanca, ensombrecidas por anuncios de Trump, que hicieron abortar una visita a Washington del presidente Enrique Peña Nieto prevista para la próxima semana.
Sobre la intención de Trump de cobrar a México la construcción del muro, dijo que "hay temas inaceptables por dignidad, que no tienen que ver con las exportaciones o la economía, sino con el corazón y el orgullo de los mexicanos".
Videgaray volvió al Gobierno en los primeros días de 2017 tras renunciar en septiembre del año pasado por haber tramado un viaje de Trump a la residencia presidencial de Los Pinos, que terminó en un fiasco y pública controversia en las redes sociales.
El canciller mexicano rescató pasajes del histórico discurso nacionalista mexicano ante EEUU, al afirmar que "así como ofrecemos respeto, los mexicanos debemos respetarnos a nosotros mismos, nuestra historia y símbolos nacionales".
Las negociaciones bilaterales "continuarán", dijo el jefe de la diplomacia, a final de dos días frenéticos, en los que Trump colocó a México como un blanco principal en el exterior.
No obstante, la misión mexicana encontró "grandes coincidencias" con el equipo de Trump, encabezado por Reince Priebus, Jefe de Gabinete del Gobierno estadounidense, y Jared Kushner, asesor principal de la Presidencia, yerno del mandatario, esposo de Ivanka Trump con quien el nuevo canciller mexicano organizó la polémica visita el año pasado.
Luego de los explosivos anuncios de una agresiva política migratoria de EEUU, que contempla un muro fronterizo, Trump anunció la posibilidad de imponer una tasa de 20 por ciento a todas las importaciones desde México, para financiar la construcción del muro, dijo el jueves el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer.
"Si gravas con 20 por ciento a los 50.000 millones de dólares de importaciones (…), haciendo eso podemos ganar 10.000 millones de dólares por año y pagar fácilmente por el muro solo con este mecanismo", dijo el portavoz del mandatario estadounidense.
