Al llegar al poder en 1979, el dictador tenía una "sala de detención" instalada en el interior del edificio de cinco pisos en el 14 East 79th Street, justo enfrente de la casa del multimillonario ex alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, según dos funcionarios iraquíes que quisieron mantener su anonimato.
Los secuaces de Sadam, conocidos como agentes del Mukhabarat, con frecuencia cautivaban a iraquíes locales manteniéndolos en el sótano hasta por 15 días y usándolos como palanca para hacer a sus parientes en Irak cooperar con el gobierno de Hussein, publica el diario.
"Era una habitación oscura. Las puertas estaban reforzadas de manera que nadie pudiera entrar o salir. No hacía falta insonorizar el recinto. No se escuchaba a nadie gritando por ahí", comentaron los funcionarios.
Según ellos, todas las pruebas de este maltrato fueron destruidas cuando los investigadores federales asaltaron la misión después de la aniquilación de Sadam en 2003 durante la invasión estadounidense de Irak.
"Los funcionarios del gobierno de Estados Unidos se llevaron discos duros, ordenadores. Entraron en los sótanos y los abrieron de par en par", indicó uno de los funcionarios.