"Si comparamos la cuenca del Pacífico con la región Euroatlántica u Oriente Próximo podemos deducir que aquí [la cuenca del Pacífico] Moscú y Washington tienen más intereses comunes que discrepancias", afirmó Samuel Charap, politólogo de IISS, en una entrevista con Sputnik.
Según el investigador, hay muchos puntos de contacto entre Rusia y EEUU en esta región del mundo. Entre ellos están el mantenimiento de la libertad de navegación, la seguridad marítima, la no proliferación de armas nucleares y la prevención de conflictos armados.
Concretamente, el lugar en el que esta cooperación se ha concretado más es en la solución del problema nuclear de Corea del Norte. Según Charap, ambos países mantienen los mismos enfoques respecto a la amenaza nuclear proveniente de Pyongyang.
Otro punto de coincidencia entre Moscú y Washington es la buena voluntad que mantienen hacia los procesos de integración económica y de armonización de las relaciones de los países de la región.
"Es un aspecto muy importante ya que Rusia busca diversificar sus socios en la cuenca del Pacífico. Moscú no cierra sus puertas a la cooperación en otros formatos si estas se corresponden con sus intereses nacionales", dijo.
En este sentido, a pesar de su larga disputa con Japón sobre la soberanía de las islas Kuriles, Rusia considera muy importante la colaboración económica con el país asiático. De ahí la mejora de las relaciones bilaterales y la visita que el mandatario ruso Vladímir Putin prevé hacer el 15 de diciembre a Tokio —la primera de un presidente ruso desde 2009—.
Según la opinión de los politólogos estadounidenses, Washington no tiene nada que objetar con respecto a esta mejoría de las relaciones y, al contrario, "saluda la decisión de normalizar las relaciones ruso-japonesas".