"Recuerdo cuando preparamos las elecciones del 20 de diciembre que hablamos de que somos una fuerza política que puede recibir la simpatía y el voto de muchas personas que, sin embargo, no pensaban que pudiésemos gobernar", señala Iglesias.
"Esos votantes fueron clave: veían con simpatía nuestra irrupción y que pusiésemos en apuros a los grandes partidos, pero al ver que teníamos posibilidad de gobernar, como en estas elecciones, deciden no hacerlo", añade.
El fundador de Podemos achaca esta situación a la campaña del miedo y el miedo a lo nuevo.
"La clave fue el miedo a lo nuevo, el Brexit también pudo influir en esos temores al cambio", apunta Iglesias.