En la epístola, escrita con el motivo del Día de Rusia, Erdogan pidió que las relaciones entre los dos países se desarrollen y, además, felicitó a los rusos por la fiesta nacional.
"¡Estimado señor presidente! En nombre del pueblo turco entero felicito al pueblo ruso, a través de usted, por el Día de Rusia y deseo que las relaciones entre nuestros países alcancen el nivel merecido", dice la carta.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, en otra misiva, parecida a la de su homólogo ruso, Dmitri Medvedev, expresó esperanza en que la cooperación entre los dos países "llegue al nivel necesario que ayude a los intereses comunes de nuestros pueblos".
El jefe del Gobierno otomano también deseó a los rusos "bienestar y prosperidad".
El ataque se saldó con la muerte del piloto, el teniente coronel Oleg Peshkov, que fue atacado desde tierra tras eyectarse del caza. Otro militar ruso murió durante la operación de rescate del copiloto.
En respuesta, Rusia impuso restricciones económicas a Turquía, en particular en los ámbitos del comercio y turismo.
El Ejecutivo otomano se negó a reconocer su culpa en el incidente y presentar excusas, al asegurar que las acciones de los pilotos turcos buscaban "la protección del espacio aéreo". En varias ocasiones, Erdogan expresó su pesar con respecto al empeoramiento de las relaciones entre ambas naciones.
Por su parte, Rusia reiteró varias veces que Turquía "conoce el camino" hacia la normalización de las mismas.