Según el último balance, el ataque se saldó con 80 muertos y 350 heridos.
La explosión se produjo en una vía de una zona diplomática Wazir Akbar Khan, sobre las 8.30, hora punta en la capital afgana.
Los explosivos fueron colocados en una cisterna de agua y detonaron cerca de la embajada de Alemania y el palacio del presidente.
El Ministerio de Exteriores de Alemania informó que los empleados de la embajada resultaron heridos en el ataque.
En la zona se ubican también las embajadas de Japón, Irán y la India.
Daesh, autodenominado Estado Islámico, es una organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.