"La información que recibimos de la Media Luna Roja no es concluyente para establecer a los autores del ataque", dijo a Sputnik el director de la Cruz Roja para Oriente Medio, Robert Mardini.
El día del bombardeo en la zona fue detectado un avión no tripulado estadounidense capaz de atacar blancos terrestres, según reveló el Ministerio ruso de Defensa.
Los norteamericanos negaron estos datos.
El organismo publicó también imágenes en las que se ve junto al convoy una camioneta de los terroristas con un mortero.
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El ente ruso subrayó que precisamente ese día los terroristas del Frente Fatah al Sham (antiguo Frente al Nusra, proscrito en Rusia y otros países) iniciaron en Alepo una ofensiva con fuego de artillería y tanques.
Un panel de expertos independientes, en un informe para el Grupo Internacional de Apoyo a Siria, concluyó que el acto estuvo "muy bien planificado".
Por su parte, EEUU, Gran Bretaña y otros países occidentales culparon a Rusia del suceso.
El ataque a la caravana humanitaria de la ONU se produjo dos días después de que EEUU bombardeara a las tropas sirias que combatían a los terroristas en Deir Ezzor.