"Varios países en realidad no quieren o no muestran interés por devolver a sus propios ciudadanos relacionados con el Estado Islámico; Rusia da ejemplo al contribuir a la repatriación de los niños rusos", dijo Hennis-Plasschaert.
Hennis-Plasschaert, de visita en Moscú, se reunió la víspera con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
Según Hennis-Plasschaert, Rusia demostró ser un socio fiable para Irak, contribuyendo a su estabilidad a lo largo de los años.
Este julio, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irak llamó a los países del mundo a que repatriaran a sus ciudadanos, hijos de los combatientes del Estado Islámico.
De este modo fueron repatriados casi 500 niños.
"Planteamos la cuestión de la repatriación de los combatientes del Estado Islámico que están detenidos en el campamento de Al Hol en Siria; hay mucha gente allí, unas 70.000 personas; creo que más de 30.000 son iraquíes, muchos de ellos niños pequeños, estas personas regresarán a Irak tarde o temprano porque la situación en Al Hol no es muy buena", dijo Hennis-Plasschaert.
Agregó que si regresan a Irak, es importante tener claridad sobre "su alojamiento, las medidas de seguridad y los procedimientos de control", ya que de lo contrario la situación sería arriesgada.
Además, la representante de la ONU señaló que discutió con Lavrov la situación política en Irak.
Hennis-Plasschaert aseguró al canciller ruso que la situación en Irak ha mejorado recientemente, "las cosas están mucho mejor", pero la situación en el país "sigue siendo muy vulnerable".
*autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia