Antes trascendió que el 7 de febrero una unidad de milicias leales a Damasco que estaba llevando a cabo una operación de reconocimiento cerca de la refinería de El Isba fue atacada inesperadamente con morteros, sistemas de lanzacohetes múltiples y, poco después, por helicópteros de la Coalición internacional liderada por EEUU.
"Tras las negociaciones sostenidas por los mandos rusos en Hmeymim con representantes del Estado Mayor de la Coalición internacional, la parte estadounidense declaró que la refinería está bajo control de las Fuerzas Democráticas Sirias y los militares estadounidenses", informó el ministerio ruso.
Señaló que se abrió fuego en respuesta para "repeler ese acto de agresión contra los socios que participan en la lucha contra Daesh (autodenominado Estado Islámisco, proscrito en Rusia)".
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El canal de televisión ABC, al alegar testimonio de un funcionario estadounidense que prefirió guardar el anonimato, informó que cerca de un centenar de "militares pro-régimen" murieron en el enfrentamiento con las FDS y las fuerzas de la Coalición.
Según ese funcionario, la Coalición usó "la línea caliente" de comunicación con militares rusos para notificarlos sobre ataques de aviación "defensivos" en esta región.