Desde el Ministerio de Exteriores ruso expresaron la inquietud por las frecuentes incursiones del Ejército turco en el territorio sirio y el levantamiento de trincheras y barreras.
"No descartamos que esas fortificaciones en la frontera turco-siria puedan ser usadas por los terroristas como puestos de apoyo", advirtió la portavoz de la Cancillería, María Zajárova.