"Se trata de semanas o meses, no más, es la hora de encontrar una solución, las preguntas fueron enunciadas y no se harán más fáciles en el futuro", dijo Nimetz en una rueda de prensa conjunta con el ministro macedonio de Exteriores, Nikola Dimitrov, transmitida por el canal A1on.
En la opinión de Nimetz, se debe "avanzar rápidamente y tratar de volver a presentar algunas ideas a ambas partes" para ver si hay algún progreso dentro de varios meses.
Muchos griegos se oponen a que el país vecino se llame Macedonia y temen pretensiones territoriales.
Grecia y la antigua República Yugoslava de Macedonia llevan casi 30 años de discusiones debido al nombre de esta nación luego de la desintegración de Yugoslavia en 1991.
#Macedonia, dispuesta a renunciar a su nombre para ingresar a la #OTAN https://t.co/XDMkulcKkX pic.twitter.com/mooeP5aeP8
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 10 июня 2017 г.
Esta disputa impide el ingreso de la Antigua República Yugoslava de Macedonia en la OTAN.
El 30 de enero, el canciller griego, Nikos Kotzias, declaró que Grecia preparará para mediados de febrero un acuerdo que presentará al Gobierno para poner fin al debate sobre el nombre de Macedonia.
Lea más: Protesta multitudinaria en Grecia en defensa del nombre "Macedonia"
El acuerdo deberá ser ratificado por el Parlamento Griego.
El 18 de enero, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, llamó a las autoridades de Macedonia a reiniciar las negociaciones bajo el auspicio de la ONU para resolver el problema con su nombre oficial.
Varias fuentes diplomáticas en Atenas aseguraron a Sputnik que EEUU y la OTAN ejercen una gran presión sobre Skopie para que entre en la Alianza Atlántica antes de la cumbre del organismo que se celebrará los días 11 y 12 de julio de 2018.
Ofensiva 'a toda máquina': cómo la OTAN ocupa a los Balcanes https://t.co/qTVxdcaXGi
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 20 октября 2017 г.
Algunos medios especularon que uno de los posibles nombres de la antigua provincia de la desaparecida Yugoslavia podría ser Nueva Macedonia, sin embargo, fuentes cercanas al Gobierno griego refutaron categóricamente esa posibilidad.