La segunda meta es tratar de involucrar a los miembros de la OTAN en el conflicto del este de Ucrania, lo que, a juicio del entrevistado, es un callejón sin salida. Además, se trata de un intento de transferir la responsabilidad a 'actores externos'.
"También hay una meta propagandística, que consiste en mostrarle al pueblo que todo lo malo que pasa con Ucrania está vinculado con la guerra. No obstante, el futuro ingreso del país en la OTAN, que en realidad por ahora es poco probable, hará que la situación mejore", declaró Asáfov.
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El analista aseveró que Poroshenko cree que este enfoque respecto al problema le quitará responsabilidad sobre la crisis institucional que en estos momentos sacude Ucrania.
La Rada Suprema —Parlamento de Ucrania— aprobó el 8 de junio una ley que supone una enmienda a la legislación acerca de la política exterior e interior del país. Una de las metas principales de la política nacional es ahora hacerse un hueco en la Alianza Atlántica.
Anteriormente, el exsecretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, había afirmado que el ingreso de Ucrania al bloque requiere del cumplimiento de ciertos criterios, de manera que, probablemente, tomará mucho tiempo. Diversos analistas consideran que Ucrania no podrá formar parte de la Alianza Atlántica hasta dentro de al menos dos décadas.