El Parlamento Europeo aprobó a finales de noviembre una resolución que recomienda a la UE suspender las negociaciones sobre la entrada de Turquía en la UE.
Previamente la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, declaró que la UE y los países miembros siguen con gran preocupación los últimos acontecimientos en Turquía, refiriéndose a las propuestas para restablecer la pena de muerte, las continuas restricciones a la libertad de prensa, el cierre de algunos medios, las órdenes de arresto contra periodistas y la reciente detención de varios parlamentarios.
En marzo de 2016 los líderes de los países miembros de la UE acordaron intensificar las negociaciones sobre el ingreso de Turquía a la UE si ayuda a reducir el flujo de migrantes que se dirigieron a Europa a través de su territorio.