El presentador del programa Conflict Zone, de DW, 'bombardeó' a Klimkin con preguntas incómodas, a la mayoría de las cuales el ministro ucraniano no logró dar una respuesta razonable. Como resultado, los usuarios de internet calificaron la entrevista como 'la vergüenza de Klimkin'.
"Occidente está muy decepcionado con el hecho de que el Parlamento de Ucrania no aprobara cambios en la Constitución que, en realidad, darían autonomía a las regiones separatistas. Esta era una condición clave de los acuerdos de Minsk, en su párrafo 11. Los cambios debían haber sido aprobados antes de finales del año pasado. Sin embargo, Ucrania no ha avanzado. No cumple con sus obligaciones", dijo el periodista.
Por lo tanto, el periodista concluyó que "Minsk está muerto", lo que significa que Kiev no sigue con el plan elaborado ni cumple con sus obligaciones ante la UE.
Durante toda la entrevista, el ministro de Asuntos Exteriores trató de convencer al periodista de que durante los últimos dos años, la ex república soviética había hecho más pasos adelante que en todos los años de su independencia.
"Estoy absolutamente lleno de optimismo respecto a lo que se ha hecho en términos de reformas reales", aseguró Klimkin.
"Parece que usted vive en otra realidad, señor ministro […]. No han conseguido llevar un solo caso de corrupción al tribunal, y al mismo tiempo, usted me dice que el país se está moviendo hacia adelante", respondió sorprendido el presentador.
"Tres cuartas partes de la población creen que no pueden esperar un juicio justo. Entre los que recurrieron a los tribunales, el 31% afirmó que los funcionarios judiciales exigían sobornos […]. ¿Usted cree que hay motivos para el orgullo?", afirmó el periodista.
"Le voy a dar otro ejemplo. Recuerdo muy bien esta encuesta. Durante el régimen anterior, la credibilidad en los tribunales de Ucrania la experimentaba solo el 4% de la población. Imagínese, solo el 4% de los ucranianos. Incluso si lo dijeron con algún impulso emocional. Hoy la situación es totalmente diferente. Después, cuando comparamos los niveles de las encuestas sobre el nivel de confianza en la policía, entonces y ahora, antes no superaba el 5%, y hoy es de más del 50%", afirmó Klimkin, a pesar de que la pregunta no se refería a la policía, sino a los tribunales.
"No, no es así. Y le voy a decir por qué. Porque aquí entra en juego el nivel de las expectativas, se trata de entender lo que hay que hacer. Para mí, personalmente, usted sabe, el nivel de expectativas es muy alto. Y cada uno debe corresponder a este nivel de expectativas, que es totalmente diferente al de la época anterior. Pero el movimiento hacia adelante es, definitivamente, una cosa que tiene que ver con nosotros", contestó, de forma errática, Klimkin.