El centro de investigaciones Stratfor indica que en 2016 Ucrania podría experimentar significativos cambios políticos.
A principios de diciembre concluyó el primer año de trabajo del Gabinete de Ministros de Ucrania, que cerró con un descontento generalizado con su trabajo en conjunto y con el desempeño del primer ministro en particular, por lo que los diputados de la coalición insisten en la renuncia de Yatseniuk.
Los resultados de una encuesta realizada por el grupo sociológico Rating indican que casi un 70 por ciento de los ucranianos apoyan esta renuncia.
La mayoría de los ciudadanos del país quisieran ver a Yatseniuk reemplazado por el actual gobernador de la región de Odesa, el expresidente de Georgia, Mijaíl Saakashvili.
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Los partidos de la coalición intentan tomar distancia del primer ministro; en septiembre de 2015, por ejemplo, el Partido Radical abandonó la coalición tras la aprobación de las enmiendas a la Ley sobre Descentralización.
Tras la llegada en 2014 de Petró Poroshenko y Arseni Yatseniuk al poder, ellos comenzaron a conformar el Gobierno siguiendo las pautas de los partidos prooccidentales, pero a consecuencia del conflicto bélico en Donbás, la significativa caída económica y las dolorosas medidas económicas, los ciudadanos y los políticos comenzaron a expresar una inconformidad evidente respecto a las autoridades.
La nula efectividad de las reformas y la lentitud de la implementación de estas desataron protestas y propiciaron la caída de la popularidad del Gobierno.
Las contradicciones políticas y los cambios tendrán consecuencias dentro del país, pero también pueden incidir en las relaciones con Rusia, cualquier elección anticipada puede conducir al incumplimiento de los acuerdos de Minsk, añade el artículo de Stratfor.
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El destino del actual Gobierno dependerá de la decisión del Parlamento.
Pese a la baja popularidad entre la población del gabinete de Yatseniuk y las múltiples críticas que ha sufrido por parte de los parlamentarios, este todavía cuenta con el apoyo de los acreedores de Occidente, ya que ellos ofrecen el apoyo financiero a Kiev en base al plan de reformas propuesto por el actual primer ministro de Ucrania.
