“He instruido a nuestros representantes en el Grupo de Contacto Trilateral que firmen de inmediato con la OSCE y Rusia (…) un acuerdo para garantizar la creación de una zona colchón de 30 kilómetros a lo largo de la línea de separación”, dijo Poroshenko quien cumple una visita de trabajo a la Región de Lugansk.
El presidente instó también a "retirar la artillería que queda, los carros de combate y los morteros para que sea imposible realizar bombardeos continuos".
“Ayer, nuestros esfuerzos diplomáticos tuvieron éxito”, dijo el mandatario ucraniano y precisó que en unos días “todas las armas pesadas serán retiradas bajo la égida de la OSCE”.
A su vez el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Grigori Karasin, al comentar las declaraciones de Poroshenko, manifestó que Kiev no aprovechó la oportunidad de firmar el acuerdo el martes.
“Ayer los representantes de Donetsk, Lugansk, la OSCE y Rusia estuvieron dispuestos a firmar este acuerdo, sin embargo, en el último momento los representantes de Ucrania tomaron una pausa para acordarlo todo”, subrayó Karasin.
Kiev lanzó una operación militar en abril de 2014 en las provincias de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, para ahogar los focos de indignación por el cambio de poder violento en el país en febrero de ese mismo año.
El conflicto ya se ha saldado con al menos 6.500 muertos y más de 16.000 heridos, según estimaciones de la ONU.
