"El Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto ley para combatir los excesos en determinadas zonas turísticas, con el objetivo de forzar un cambio real en el modelo turístico de este destino, fomentar el civismo, adoptar medidas de protección del destino y evitar los problemas derivados de un consumo excesivo de alcohol", informó el Gobierno balear en un comunicado.
Se trata de la primera norma de este tipo que se adopta en toda Europa con el fin de restringir la promoción del consumo de alcohol, así como su venta, en lugares frecuentados por los visitantes extranjeros.
El Gobierno quiere "revertir" una situación que afecta a la imagen y el posicionamiento de las islas como destinos internacionales, con el fin también de mejorar la competitividad de esta comunidad autónoma.
El decreto entrará en vigor en zonas concretas de la Playa de Palma, s'Arenal, Magaluf, y el popularmente conocido como West End de Sant Antoni de Portmany, zonas conocidas por los excesos de los turistas que las frecuentan.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) December 22, 2019
En concreto, se prohibirá la "publicidad que incentive el consumo de alcohol en establecimientos turísticos", como las barras libres, las 'happy hours' u otro tipo de promociones similares, así como la exhibición de bebidas.
La venta de alcohol en tiendas no estará permitida entre las 21:30 y las 8:00 horas, mientras que se deberá cobrar a los clientes un precio unitario, sin promociones como el '2x1' o el '3x2'.
También se contempla la expulsión de los hoteles para los turistas que practiquen el balconing —saltar a una piscina desde el balcón de la habitación—, un fenómeno que cada año ocasiona varias muertes.
A aquellos que cometan faltas graves o muy graves, es decir, acciones que sean peligrosas para la salud o integridad de las personas, se impondrá multas de entre 6.000 y 600.000 euros, este último extremo en los casos más graves.
Otras sanciones implican el cierre de establecimientos por un periodo máximo de tres años, mientras que las faltas leves estarán penadas con multas a partir de 1.000 euros que llegarán a los 6.000 euros.