El Santander, principal banco de España por el volumen de sus activos y uno de los más importantes de Europa, suspende por segundo año consecutivo los exámenes estadounidenses.
La Reserva Federal rechazó los planes de capital del banco español y del alemán por deficiencias en su capacidad para prever riesgos financieros.
“Tienen deficiencias críticas y generalizadas en sus planes de capital”, aseguró la Reserva Federal.
Tras esto, las dos entidades deberán volver a entregar nuevos planes de capital y suspender el pago de dividendos previstos a sus matrices.
Según el informe, el Santander presenta deficiencias específicas en su gobierno corporativo, controles internos, identificación y gestión de riesgos y sus sistemas de información.
A pesar de suspender el examen cualitativo, la entidad española sí aprobó el cuantitativo, es decir, tendría capital suficiente en caso de fuerte deterioro económico.
En este examen consiguió un ratio de capital Tier 1, el de mayor calidad, del 9,4% en un escenario adverso (el mínimo exigido para aprobar es en este caso sólo un 5%).
En el caso del Deutsche Bank, la situación es similar a la de la entidad española.
La Reserva Federal señaló numerosas deficiencias en el proceso de identificación de riesgos, controles internos y planes de contingencia ante posibles pérdidas.
Santander Holdings USA, la filial estadounidense, supone un 10% del beneficio del banco español, unos 800 millones, además de un 9% de sus préstamos y el 7% de sus depósitos.
En 2014 el Banco Santander obtuvo un beneficio de 5.816 millones de euros, un 39% más que en 2013, según las cuentas publicadas por la entidad.
Por primera vez en época de crisis, la entidad tuvo beneficios en los 10 mercados principales en los que opera.
