"Todos los países apoyaron la propuesta de prolongar por nueve meses el acuerdo bajo los mismos parámetros establecidos en diciembre del año pasado, precisamente esta opción fue recomendada a la OPEP+ por el Comité Ministerial Conjunto para el seguimiento del recorte petrolero", dijo Nóvak a la prensa.
El ministro añadió que el comité no estudiaba una prórroga que sea más de nueve meses.
"La opinión común fue que habría que pasar el período de invierno, un período de baja demanda, así que mejor prolongar de una vez por nueve meses", explicó.
Asimismo Nóvak subrayó que el acuerdo fue sobrecumplido en mayo en 750.000 barriles diarios.
Además, el ministro señaló que la reducción de la producción petrolera por parte de Rusia en el marco de la OPEP+ fue de unos 278.500 barriles diarios en junio.
El convenio entre la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) y 12 productores independientes, vigente desde 2017, en busca de estabilizar los precios del hidrocarburo, fue prorrogado varias veces.
Rusia se comprometió a reducir su extracción de petróleo en 228.000 barriles diarios frente a los 11,4 millones de barriles extraídos en octubre pasado.
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Los países de la OPEP y no OPEP se reúnen los días 1 y 2 de julio para debatir el futuro del acuerdo.
Irán en el mercado del crudo
El ministro subrayó que Rusia está interesada en que Irán, uno de los suministradores más importantes de agentes energéticos, siga siendo miembro con plenitud de derechos en el mercado mundial del petróleo.
Según la oficina de prensa del ministerio ruso, las partes debatieron un amplio círculo de asuntos de la cooperación bilateral, incluida la implementación de proyectos inversionistas en el sector energético.
Trataron el tema de la cooperación entre Rusia e Irán en el marco de la OPEP+ y la situación en los mercados petroleros del mundo.
Las relaciones entre EEUU e Irán se agravaron mucho últimamente.
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Washington impuso sanciones duras contra las ramas clave de la economía iraní y sigue recrudeciendo la presión con el fin de "cambiar la conducta" de la República Islámica.
También usó sanciones "secundarias" para obligar a los países a renunciar a la compra del petróleo iraní.