"Se aprobaron una serie de medidas para reforzar la protección de la frontera estatal en las zonas de posible entrada de miembros de organizaciones extremistas y terroristas internacionales", dijo Pátrushev.
El secretario también comunicó que el año pasado las fuerzas de seguridad de Rusia no permitieron que más de un centenar de residentes del Cáucaso del Norte se fueran al extranjero para luchar al lado de los terroristas.
"El peligro potencial lo representan los que abanderan la ideología radical, incluidos los familiares de los participantes de conflictos armados que utilizan el canal humanitario para el regreso", subrayó Pátrushev.
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Añadió que "hay que prestar una atención especial a los menores sometidos a la influencia de la propaganda en territorios controlados por los terroristas, incluidos los que pasaron entrenamiento en campos especiales".
