"La finalización de la revisión está sujeta a la aprobación de directorio ejecutivo del FMI y pondrá a disposición 7.600 millones millones de dólares", señaló este 26 de noviembre la entidad en un comunicado.
La comitiva del organismo multilateral y el Gobierno de Mauricio Macri llegaron "a un acuerdo en torno a la segunda revisión del programa económico respaldado por el acuerdo stand-by" (de contingencia) firmado en junio.
"Felicitamos a las autoridades por sus continuos esfuerzos para avanzar en su programa de reforma económica, que incluye un respaldo político a la ley presupuestaria" sancionada en el Congreso, manifestó el Fondo.
Según el equipo del FMI liderado por Cardarelli, "el programa del Gobierno es esencial para allanar el camino hacia un repunte de la actividad económica en 2019 y para apoyar la creación de empleos, reducir la pobreza y mejorar el nivel de vida de todos los argentinos".
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El FMI también valoró la nueva política monetaria del Banco Central de la República Argentina (BCRA) vigente desde octubre que permitió "estabilizar los mercados financieros y la extrema volatilidad [de la moneda local] en agosto y septiembre" y que habilitará "un proceso gradual de acumulación de reservas" si el peso argentino se cae por debajo de la zona de flotación" marcada por la entidad.
El Fondo manifestó sus expectativas de que el Gobierno de Macri alcance su objetivo fiscal para 2018.
En ese sentido, "la eliminación del déficit fiscal primario es necesario para reducir las necesidades de financiación del Gobierno y para que la relación entre deuda y PIB vaya descendiendo", resumió el FMI.
Contexto
El Ejecutivo cerró a finales de octubre este nuevo acuerdo con el organismo que amplía el crédito inicial de 50.000 millones de dólares concedido en junio y que acelera el calendario de pagos, la mayoría de los cuales se desembolsarán entre este año y el que viene.
Bajo la administración de Guido Sandleris, el BCRA consiguió controlar la depreciación continua del peso argentino que había comenzado a principios de mayo con la implementación de dos medidas desde octubre.
La primera establece un sistema de ajuste de la base monetaria que congela la cantidad de dinero circulante hasta junio de 2019.
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La segunda dispone un esquema de flotación del tipo de cambio entre los 34 y los 44 pesos, ajustable en 3% mensual.
El peso argentino se depreció un 46% desde finales de abril, mientras que la inflación de los últimos 12 meses fue del 40,5%, de acuerdo a datos oficiales.