"La posición del Gobierno es mantener la frontera abierta y bien controlada", dijo el director para el desarrollo y la integración fronteriza, Víctor Bautista, informó la Cancillería de Colombia.
Asimismo, señaló que las autoridades migratorias colombianas trabajan en mantener el orden y la seguridad para la población fronteriza que habita en los siete departamentos a lo largo de la frontera, de 2.200 kilómetros.
"Estamos visitando los departamentos de frontera para conocer de primera mano la caracterización" y "para priorizar las acciones que debemos realizar", dijo por su parte el embajador Lozano, según Cancillería.
La visita de los delegados del Gobierno al departamento de Arauca incluyó recorridos por su capital, también denominada Arauca, y por el río con el fin de monitorear la situación de los migrantes y verificar los pasos irregulares.
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Las tensiones entre Bogotá y Caracas por asuntos fronterizos se presentan desde agosto de 2015, cuando el presidente venezolano Nicolás Maduro ordenó el cierre de todos los puntos de tránsito a lo largo de la frontera a raíz del contrabando y el ingreso de paramilitares colombianos a su territorio, según sostuvo en ese momento.