El Departamento de Justicia de Estados Unidos acaba de presentar cargos adicionales contra varios oficiales y exoficiales de la Marina en el caso conocido como 'Fat Leonard'. Este escándalo se está convirtiendo en uno de los más impactantes de la historia de la Armada. Están involucrados, entre otros, el contralmirante retirado Bruce Loveless, que en su momento dirigía las operaciones de inteligencia de la Marina de EEUU.
Los cargos contra ellos incluyen la conspiración, la obstrucción a la Justicia y el soborno. Los fiscales dicen que algunos de los hombres mintieron sobre su relación con el excontratista de defensa con sede en Singapur Leonard Glenn Francis ('Fat Leonard'), y trataron de encubrir su actividad destruyendo pruebas incriminatorias.
Lea más: Los escándalos que sacuden al "mimado" Ejército de EEUU
A su vez, Francis, según los fiscales, recibía información militar sensible a cambio de sobornos generalizados que incluían prostitución, regalos costosos, fiestas salvajes y otros beneficios semejantes. El contratista empleaba la información que le proporcionaban para extorsionar a la Marina de EEUU por servicios portuarios a nombre de su firma, Glenn Marine Defense Asia. El valor monetario de esta extorsión ronda los 20 millones de dólares.
El excontratista también está acusado de organizar fiestas sexuales salvajes, a veces durante días, en buques de guerra navales. En los comprometedores documentos se afirma que un grupo de marines se encontró en el hotel Shangri-La, en Manila (Filipinas). La reunión tuvo lugar en la suite MacArthur, una habitación de alto precio construida en honor al excomandante de cinco estrellas del Pacífico de Estados Unidos, Douglas MacArthur. Durante la orgía, "los recuerdos históricos relacionados con el general Douglas MacArthur fueron utilizados por los participantes en actos sexuales".
