El reporte epidemiológico oficial, con datos hasta la noche del 31 de agosto, reveló que en la jornada anterior se confirmaron 61 fallecimientos, casi la mitad en el departamento de La Paz, donde se registra el mayor avance de la pandemia desde principios de agosto.
En las pasadas 24 horas, los nuevos casos de COVID-19 reportados fueron 630, con los que el total acumulado llegó a 116.598.
La cifra de nuevos contagios del 31 de agosto seguía la tendencia descendente observada desde la semana pasada, con un promedio de menos de 1.000 casos diarios.
La ralentización del avance de la pandemia se registraba mientras Bolivia ingresaba en un régimen de posconfinamiento, con progresiva normalización de actividades luego de más de cinco meses de cuarentena.